20 de mayo de 2013

No importa fracasar...

"Es de héroes sonreír con el corazón llorando, fracasar mil veces y aún así seguir luchando."


¿Qué es la amistad?

¿Un sentimiento? ¿Una emoción? He leído que es una relación afectiva.
Yo, sinceramente, no sabría qué decir. La amistad es algo que surge así sin quererlo ni buscarlo, sin saber cuándo ni dónde surgirá. Es algo hermoso que surge entre dos, un lazo, un lazo atado con un nudo naval, un nudo que nunca se romperá. Los años pasarán y seguiremos sacando sonrisas, lágrimas, risas, buenos momentos y otros malos. Compartiremos emociones, sentimientos, experiencias, pensamientos, opiniones, gustos, amores...
No hacen falta meses para forjar una buena amistad, con tan solo días, o simplemente horas, es suficiente.
Tampoco hace falta mentir diciendo que la amistad es algo perfecto porque, como cualquier cosa, también tiene sus taras. Esas taras también son los llamados "rocecillos".
No se pueden evitar, surgen queramos o no. En ocasiones pueden acabar con una relación pero, yo pienso, que si la amistad es de verdad y el destino quiso juntar a esas dos personas en su día, no va a separarlas ahora por capricho. Porque cuando de verdad quieres a un amigo, sabes dónde están los límites y también sabes que hay momentos en los que hay que dejar a un lado la chulería, comerse el orgullo y pedir perdón.
Muchísimas personas piensan que pedir perdón es rebajarse o humillarse. Honestamente creo que pedir perdón es un acto de valentía y un detalle muy bonito que demuestra de verdad quiénes siempre estarán ahí, a las buenas y a las malas, y cuánto te quieren y valoran tu amistad.
Aquel que pida perdón no será menos que aquel que lo reciba.
En ocasiones, de tanto comer orgullo, tocará reventar. Así que valora la amistad, que no es un simple juego de niños, cuídala y déjate de tonterías. Recuerda que un amigo es para toda la vida.